1. Plantillas acolchadas: Estas plantillas están diseñadas para proporcionar amortiguación adicional y apoyo para los pies, lo que ayuda a reducir la fatiga y el dolor al caminar o estar de pie durante largos períodos.

2. Almohadillas para el talón: Son almohadillas adhesivas que se colocan en la parte posterior del zapato para evitar el roce y la irritación en el talón, proporcionando mayor comodidad y previniendo la formación de ampollas.

3. Espaciadores de dedos: Estos dispositivos se utilizan para separar los dedos de los pies y aliviar la presión en el área del antepié, lo que puede ser útil para personas que sufren de juanetes u otros problemas de los dedos.

4. Protectores de callos y juanetes: Son almohadillas o fundas que se colocan sobre los callos o juanetes para protegerlos del roce y la presión, proporcionando alivio del dolor y permitiendo un mayor confort al caminar.

5. Gel de confort para el arco: Este gel se coloca debajo del arco del pie para proporcionar apoyo adicional y aliviar la tensión en esta área, lo que puede ser beneficioso para personas con pies planos o arcos caídos.

6. Hormas para zapatos: Estas son herramientas de plástico o madera que se colocan dentro de los zapatos para ayudar a mantener su forma y evitar que se deformen con el tiempo, lo que puede mejorar el ajuste y la comodidad.

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